"Yo en el área no fiaba" Por: Francisco Henao Bolívar. Enviado especial de El Pais - Tumaco. Víctor Bonilla acude todas las tardes a la cancha de Texas para entrenar con el equipo de veteranos de Nariño, en el que también están Enrique Esterilla y Hernando Cuero, entre otros. Jaime Saldarriaga I El País Jugó en el Caldas y América, pero sus mayores gestas como goleador las logró en el vecino país. "No estuve en Selección Colombia porque en esa época también había rosca. A Víctor, mi hijo, lo veo como un jugador muy frío dentro del área. Uno ahí tiene que ser egoísta". La nueva generación prácticamente no lo conoce. Cuando se habla de Víctor Bonilla las miradas apuntan al aún jugador del América y de reciente paso por el Barcelona de Ecuador. Pero la vieja guardia sabe que en el fútbol colombiano existió otro Víctor Bonilla, delantero y goleador como su hijo. Al ex jugador de América y otros equipos lo encontramos en la cancha de Texas, en Tumaco, dándole todavía al balón pese a sus 52 'abriles'. Bonilla, el viejo, le contó a El Pais su historia como jugador. ¿Cuál fue su recorrido en el fútbol? Yo estuve con Tumaco en unos Nacionales en Pereira, en 1975, torneo en el que hice 47 goles; de ahí pasé al Caldas, después al Pereira, América y luego al 9 de Octubre de Ecuador, en donde estuve diez años y salí dos veces como máximo goleador. ¿Por qué su nombre no fue tan sonoro como el de Willington y el de otros tumaqueños? En ese tiempo los equipos cogían jugadores con más experiencia; por eso me tocó irme para Ecuador, donde brillé con luz propia y en donde dejé un nombre. Incluso, allá decían que el delantero de la Selección Colombia estaba en Ecuador, pero nunca me llamaron. ¿Por qué no lo convocaron a la Selección? Porque siempre ha predominado la rosca; a los únicos que llaman son a los jugadores de Antioquia y Valle; a los de Nariño los han tenido olvidados. ¿Cómo se dio su paso al fútbol ecuatoriano? América me prestó al 9 de Octubre; allí había un presidente que no creía en mí, pero en el primer entrenamiento le hice ocho goles y desde ahí dijeron que yo era un diablo jugando fútbol. Comencé a echarme a la gente al bolsillo porque en cada partido respondía con goles. ¿En qué otros clubes de Ecuador actuó? Además del 9 de Octubre jugué en Deportivo Quevedo y en Liga Deportiva Estudiantil. ¿Quiénes eran los mejores jugadores de su época? Alejandro Brand y Willington Ortiz, eso es indiscutible. ¿Era mejor el fútbol de antes que el de ahora? El de ahora es más rápido, con más técnica y más movilidad en el ataque; hoy el marcador es puntero y el puntero es lateral. El fútbol ha progresado mucho. ¿En su época hubo doping? Los tumaqueños no necesitábamos de nada para jugar bien, porque entrenábamos en un arenero y cuando uno llegaba a una cancha con gramilla, todo el mundo volaba. Además, comíamos buen ‘pescao’, era del mar a la olla, sin necesidad de nevera ni nada, entonces eso era una buena vitamina y de ahí que todos los tumaqueños corriéramos mucho. ¿Cuál de sus goles es el que más recuerda? Uno que anoté aquí en Tumaco, cuando dejé el balón pegado en la malla y el árbitro pensó que no había entrado. Cuando lo ví que dudó, le dije: señor árbitro, si cree que no fue gol, vaya y baje el balón que está enredado con la malla pero en la parte de adentro. Dato clave Víctor Bonilla vive en Tumaco con su esposa Gladys y sus hijos Cecilia, Olga Lucía, Mabel, Erick y Fernando. El mayor de todos es Víctor Manuel, quien entrena con el América para jugar el próximo semestre, luego de su regreso de Ecuador. ¿Los jugadores de antes también le 'jalaban' al licor? Yo me tomaba mis cervezas después de los partidos. En Ecuador los directivos me decían: Bonilla, desde que usted haga goles tómese sus cervecitas. El presidente del equipo me pagaba mis premios y hasta con él nos tomábamos una que otra cerveza. Usted jugó en el América. ¿Cómo le fue en Cali, una ciudad salsera, rumbera...? En Cali me fue bien; cuando algún compañero cumplía años, hacíamos la vaca y nos reuníamos en la casa de Ferrín o de Américo Quiñónez y ahí la pasábamos bien; pero la verdad era que a Cali le tenía miedo por el tema de la inseguridad, porque si uno cargaba plata lo fregaban y si no llevaba, le daban más duro. ¿Cuál fue el defensa que más duro le pegó en una cancha? Jorge Bermúdez (padre). Ese hombre me dejó marcadas las piernas. Una vez en un clásico Once Caldas-Quindío me mandó para la clínica. A mí me daban pata, pero yo les daba ‘melo’ y los hacía expulsar. ¿De sus vivencias, qué anécdota es la que más recuerda? La de Eladio Mideros, que también es tumaqueño y jugó como ecuatoriano en Emelec y en la selección de Ecuador. Cuando se dieron cuenta de que era colombiano y que estaba con papeles arreglados lo denunciaron y le expidieron orden de captura. Eladio tuvo que salir de Ecuador vestido de mujer. ¿Quién fue mejor: usted o su hijo Víctor? Eso está por verse. El fútbol mío fue claro: yo dentro del área no fiaba. Cuando yo entraba a la zona de candela si no era gol pegaba en el palo. A mí me parece que Víctor es muy frío. En el área hay que ser egoísta. Ahí uno tiene que definir. ¿Por qué le fue mal a Víctor en Ecuador? No sé, de pronto le pesó el nombre que yo había dejado allá. Yo lo veía por televisión y la verdad es que cuando un delantero hace un gol en nueve partidos, eso quiere decir que las cosas no están funcionando. A un delantero lo contratan es para hacer goles, pero él no pudo conseguirlos allá. Si usted jugara ahora, con los sueldos que se están pagando, sería rico... Claro, viviría bien y no estaría pasando las dificultades que estoy atravesando hoy. El número 52 años cumplió Bonilla el 15 de abril. Pese a su edad, entrena con el equipo de veteranos de Nariño para jugar un torneo en Cali.
HadezzzzRa....ya teniamos hilo de Victor.... es el mismo, que se entrena con walter escobar en aguablanca? incdreible....ese man es de 55 abriles?
Este es Victor Bonilla, el papa de Victor Bonilla... del que puse la noticia es Victor Bonilla hijo... Que esta entrenando a Pacifico si no estoy mal. Ni me acordaba de esa noticia... wow